XVIII.- El principio del fin.-

Me pudo la culpa y me decidi a actualizar… bah, lo de la culpa es mentira, pero pintó esto de escribir un poco para el blog.

Luego de haber vivido en Ashburton durante dos semanas (esto es a 28 kms de nuestro trabajo), conseguimos una casa en Rakaia, a 5 minutos de auto de la fabrica donde empacamos los bulbos de las flores del mal. Asi fue como hace un mes nos encontramos viviendo en este pueblo de 1000 habitantes situado en el medio de la nada y sin atracciones turisticas aparentes.

Como generalmente trabajabamos 6 dias a la semana sólo nos quedaban los domingos libres para pasear por algun lugar aledaño, asi fue como un par de veces fuimos a Christchurch a visitar a Alejo (que ya abandonó la isla sur para volverse a Auckland) dónde nos dedicamos al consumismo innecesario de comidas variadas y demases nimiedades. Otro fin de semana nos fuimos con Guille y Mara a pasear por la zona, corrimos por un monte (¿?), almorzamos en un pueblo y luego llegamos a un lago en el medio de algun lugar recóndito, donde terminamos jugando al futbol (N.d.R: Mara la rompe jugando al futbol!), el último fin de semana nos fuimos a Akaroa, un pueblo hermoso que fue colonia francesa en algun punto del siglo XIX.-

Hace dos fines de semana fuimos a ver a los All Blacks que jugaban contra Australia en Christchurch. El partido estuvo bastante bien, la gente es medio carente de onda para cualquier evento deportivo… mucho no gritaban, mucho no cantaban y nos tuvieron cerca de 6 minutos haciendo la fucking ola. Los All Blacks ganaron y 5 minutos despues el estadio estaba casi vacío, nada de “dale campeon!” o de “despacito, despacito, despacitóóóóó, les rompimós el culitó”… igual tampoco se extrañó demasiado.

La temporada de bulbos está llegó a su fin. Guille, Mati y yo ya no trabajamos más, a Fabio le quedan uno o dos días de laburo. Nuestra nueva actividad (estar al pedo), la llevamos de lo más bien ocupandonos de una amplia gama de actividades como ir a Internet, dormir, leer, inventar recetas cuando el embole llega a su pico.

Sólo nos quedan tres o cuatro días en nuestra casa, y luego se viene un poco de viaje a través de la isla sur, para finalmente cruzar con el auto hacia la isla norte y tratar de venderlo en Auckland, para luego emprender un viaje de un mes recorriendo, principalmente, Tailandia y Vietnam.

Luego de 8 meses ya empieza a darme vueltas la sensación de que todo esto se está acabando. Por un lado es una sensación no del todo agradable, ya que uno nunca sabe como le responderá la mente a esa cuestión de volver a la rutina del laburo en una ciudad, sin tener esta libertad de moverse a otra ciudad luego de un tiempo determinado. Pero, por otro lado, no voy a negar que la idea de volver a ver a todos mis amigos y parientes me tienta bastante… ni que hablar la idea de comer un asado! 8 meses sin asado!

Nunca me imaginé, estando en Argentina, las sensaciones que se pueden llegar a vivir luego de tanto tiempo de estar fuera de casa, los cambios que uno va realizando y la cantidad de gente que conoci y que, en algunos casos, jamás en la vida volveré a ver. Es como poner pausa por un año y jugar a ser nómade en un lugar lejano, tengo la sensación de que no soy del todo consciente de todo lo que estoy viviendo, y que sólo en el momento en que pare todo esto y me encuentre solo en el sillon de casa lograré tomar dimensión de lo que este viaje significó!.

Pero bueno, faltan unos meses aun para esa situación de estar sentado en el sillón… asi que ahora hay que concentrarse en viajar y disfrutar lo máximo posible. El próximo destino es Dunedin, alli nos encontraremos nuevamente con Alejo, que está viajando con su hermana, e iremos a la fábrica de chocolates más grande del país… agarrate Cardbury!

Saludos para todos! Me voy a seguir robando wi-fi de la estacion de servicio!